miércoles, 18 de enero de 2012

¿Eras moderno?

A lo mejor te ha pasado que estando con un pata como pasivo, ya que él te había contado y advertido que él no lo era, de pronto los roles se invierten.
O puede pasarte al revés...
Ya hemos dicho anteriormente que mucha gente asimila ser activo con ser fuerte, y ser pasivo con ser débil, o con roles masculinos y femeninos, respectivamente, y con esa creencia sostienen relacioness sexuales.
En la mayor parte de casos, hay patas que se sienten cómodos haciendo de modernos, es decir, ejecutando ambos roles (versátiles), y aún siendo bisexuales. Entonces, ¿te mintieron o qué?
En realidad, esos 'raptos' son sinceramientos reales del individuo con su sexualidad. ¿Para qué seguir pretendiendo ser quien no eres?
Mucha gente que se fija en un rol, que sinceramente no lo siente, termina disfrutando poco o nada del coito, al punto que, tras el orgasmo, son invadidos por sentimientos de culpa, frustración y hasta violencia.
Un primer aspecto que debemos desterrar de nuestra cabeza es igualar activo con fuerte y pasivo con débil. Tal relación no se corresponde con la realidad, ya que, como dijimos antes, dejarse meter el pene en el ano , o en la boca, no es, precisamente, símbolo de debilidad... si no, hagan la prueba.
Aunque parezca descabellado, quienes practican ambos roles tienden a lograr más satisfacción cada vez que tienen relaciones. eso no quiere decir que los exclusivamente activos o pasivos no lo consigan, pero los casos son bien pocos.
De cualquier manera, si te pasa que en pleno acto, el que era activo, o pasivo, se cambia de rol, haz lo siguiente:
- Tómatelo naturalmente. Déjalo ser, siempre y cuando te guste, esto es, si no tienes problemas en alternar roles (o sea, si también eres moderno o versátil), haz como si nada hubiera pasado, y no pongas cara de sorpresa.
- Si eres exclusivamente activo o pasivo, y tu pareja camvia de rol súbitamente, no se lo reclames, ni hagas sentir mal, ni humilles, ni burles. Con mucho tacto, para la acción, y de manera tranquila, respetuosa y amable, dí que prefieres seguir ejecutando el rol de tu preferencia.
- Sólo si él te plantea el tema, háblenlo como la cosa más natural del mundo. No lo cuestiones de primera mano, ya que él está asumiendo aspectos de su sexualidad que, quizás, no sospechaba, así que si te la vas a dar de cuestionador, él se alejará buscando quién le dé confianza para expresarse. En todo caso, déjale tomar la iniciativa de hablar sobre este particular.
- Si el encuentro se repite, no fuerces su rol, deja que poco a poco la cosa vaya fluyendo, y verás que sus orgasmos (de ambos, o de los que sean) serán mejores.
- Ten a mano un condón extra por si acaso.
- No seas indiscreto. No andes ventilando por ahí lo que pasó entre cuatro paredes. Es de pésimo gusto.

¿Preguntas? ¿Comentarios? hunks.piura@gmail.com o déjalos aquí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario