Estiramientos tipo gato

Alguna vez te debe haber pasado que necesitas practicar abdominales, pero no hay colchoneta, el suelo es muy irregular o no estás en el gym.
Hay un ejercicio que puede ser de utilidad para quienes ya han logrado cierto desarrollo abdominal, o lo tienen plano, y carecen de las condiciones para hacer abdominales o pilates sin hacerse daño a la espalda: los estiramientos tipo gato.
Como su nombre lo dice, imitan el movimiento que hacen los felinos caseros para quitarse la pereza.
La maniobra es simple:
1. Ponte en cuatro sobre el suelo u otra superficie.
2. Arquea la espalda hacia abajo, estirando todo el abdomen.
3. Contrae la espalda hacia arriba, apretando el vientre.
4. Repite el movimiento tantas veces resistas y repite la serie unas tres veces más.
Es probable que cuando lo practiques se te mueva la cadera como si estuvieras cachando. Es un movimiento colateral, pero recuerda que el esfuerzo se debe poner en la zona abdominal.
Como siempre, haz el movimiento con intensidad, y de preferencia antes de las rutinas de planchas o sentadillas.
Algunos de ustedes nos comentaron que cuando se pajean contra un colchón, sienten que el abdomen se ttonifica un poco y de paso los glúteos. De hecho esto es verdad, pero el truco está en hacerlo intensamente... y evitando la erección (además de no hacer sonar la cama, así que mejor baja el colchón).
Aunque, para evitar ciertos accidentes con fluídos derramados, lo del estiramiento tipo gato es una buena opción.
Si andas subidito de barriga es probable que lo sientas como un esfuerzo inútil, pero vale la pena que lo intentes. No tendrás el mismo resultado de quienes lo hacen frecuentemente, pero peor es no hacer nada.

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